23/2/11

ASI SE HA SENTIDO MI NIÑA

TESTIMONIO de ACOSO ESCOLAR.

UNA HISTORIA REAL

Creo que tengo un problema que tienen much@s otr@s chic@s. Me siento marginada por esos dos compañeros.

Lo he pensado muchas veces y he intentado descubrir por qué lo hacen, porque creo que soy buena o intento serlo siempre, no me gusta hacer malas jugadas (tu me conoces bien), ni me río de los demás.

Desde hace bastante tiempo las cosas empezaron a cambiar, los dos compañeros comenzaron a fastidiarme con mucha intensidad. Yo lógicamente me defendía, pero ellos seguían, y ¿Sabes lo que más me dolía y me duele de todo esto? Que los demás compañer@s de la clase no hacían nada por evitar las putadas y encima les reían las gracias, sin darse cuenta de la rabia y sufrimiento que eso me producía.

Además y poco a poco dejaron de invitarme a todos los cumpleaños del resto de mis compañeros.

Yo he llegado a preguntarme, ¿Tanta influencia pueden tener algunos para que los demás me quieran marginar también? Y sobre todo ¿Por qué?

Saben, estoy convencida de que se tiene que ser muy desgraciado y muy poco feliz interiormente para necesitar hacer o querer hacer tanto daño sin más ni más. A veces siento pena por ellos.

Ojala supieran ellos el dolor que me causan con su actitud al rechazarme y dejarme a un lado. A veces pienso que la causa de todo esto es porque me ven diferente en cierta forma y porque suelo entenderme bien con los adultos. Pero eso no es motivo para dejar a una persona que es humana y que tiene sus sentimientos, marginada.

Esta marginación no solo me afecta a mi, también repercute en mis padres contándoles lo que pasa con mis compañeros. Muchas veces no les cuento todo para no hacerles sufrir más.

Seguro que a ninguno de mis compañeros les gustaría pasar el trago que me hacen pasar a mí. Si se pusieran una sola vez en mi lugar, cambiarían de actitud.

Francamente, creo que no he sabido hacerme un hueco entre mis compañeros de clase, a mi no me gustan sus bromas hirientes y ellos no aceptan que yo sea diferente y descargan todos sus problemas sobre mi.

Sinceramente digo que lo estoy pasando muy mal en clase. He llegado a pensar que yo no valía nada, tal era el desprecio con el que me han llegado a tratar.

Afortunadamente yo sé muy bien lo que valgo y trato de superar esto que estoy viviendo gracias algunos amigos que sabéis realmente como soy, porque curiosamente esta marginación que estoy padeciendo ocurre con mis compañeros de clase,y personas de la calle.

Quiero solucionarlo cuanto antes! porque sino un día de estos ya no podré aguantar más y descargaré toda mi rabia sobre alguno de ellos y no respondo de mi.

Lo más gracioso, por decirlo de alguna manera, es que los compañeros que se meten conmigo y los que se ríen con sus "gracias" son en general chicos con complejos y problemas que descargan sobre mí.

En fin, perdonen por el rollo que les he metido, pero como dice mi madre, muchas veces, los amigos estamos para ayudarnos.

(TESTIMONIO DEL PSICOTERAPEUTA)

Han leído el testimonio de una chica de 16 años, que muestra de forma lúcida y conmovedora, la situación de sufrimiento, de marginación y maltrato psicológico que padece por ser algo diferente del resto de sus compañeros de clase. Situación que lamentablemente es más frecuente de lo que debería ser hoy día en las aulas.

En las clases suele ocurrir que los líderes de grupo no suelen ser los buenos alumnos y las mejores personas sino mas bien todo lo contrario, arrastrando con su actitud al resto o mayoría de alumnos hacia una especie de "coro" que jalea de forma cómplice las "gracias" de los maltratadotes en lugar de salir en defensa de sus víctimas.

La ley del silencio y la actitud de no querer ver la gravedad de situaciones como ésta que llevaron a esta chica a caer en una grave depresión, es más frecuente en nuestras aulas de lo que parece. El silencio cómplice de los compañeros. El miedo a las represalias de las víctimas. La situación de impunidad del o de los maltratadotes. La mirada que no ve de los profesores y de los padres implicados. La impotencia y falta de recursos para hacer frente a estas situaciones y evitar que se cronifiquen y agraven.

Todo esto está generando situaciones de maltrato psicológico e incluso físico de graves consecuencias para las víctimas inocentes que lo padecen, chicos y chicas generalmente buenas personas y buenos alumnos a los que les cuesta identificarse con las "maldades" de los "malos" de la clase hacia otros compañeros y que acaban por ser el cabeza de turco o chivo expiatorio del grupo de la clase durante varios cursos.

En el caso de esta chica, tras un período de tiempo de tratamiento psicoterapéutico que la alejó de las aulas durante unos dias a causa de la depresión ansiosa post-traumática que sufrió debido a la marginación y malos tratos psicológicos padecidos en el aula, afortunadamente ha podido recuperarse y continuar sus estudios. No ocurre así con otros chicos y chicas que no superan situaciones como ésta y que les dejan una marca y una vulnerabilidad de por vida.

¿Qué piensa el lector de estos testimonios?

¿Conoce otros casos parecidos?

¿Han sufrido situaciones parecidas en su familia o entorno próximo?

¿Cómo se han enfrentado al problema?

¿Lo han podido resolver o superar? ¿Con qué tipo de intervención o ayuda?

Dr. Juan Larbán Vera.

Psiquiatra-psicoterapeuta